La clase III en cirugía maxilofacial describe una alteración clásica que se reconoce porque el maxilar inferior se encuentra adelantado con respecto al superior. De este modo, el paciente presenta una mordida en la que los dientes inferiores están por delante de los superiores. Estos pacientes suelen someterse a este tratamiento, principalmente, por cuestiones de salud combinadas con un gran malestar puesto que a nivel estético no es de las combinaciones más atractivas que existen.
Características del Tipo III
- Alteraciones dentales: El paciente padece de maloclusión y dientes inferiores retroclinados.
- Características estéticas: Esta clase se caracteriza por tener el labio hundido, un mentón que predomina en el rostro y las comisuras caídas entre otras características.
Intervención quirúrgica ortognática para pacientes de tipo III
El tratamiento es largo y doloroso pero los resultados son tan atractivos a nivel estético que pocos pacientes los rechazan. En primer lugar, se recurre a una ortodoncia correctora de la dentadura ya que el tema maxilofacial y dental se mejoran por separado. En segundo lugar, se opta por la cirugía maxilofacial que, realmente, es la clave en lo que concierne a la rehabilitación del paciente.
Este proceso es largo ya que suele acarrear hasta 8 semanas de cicatrización y hasta 6 meses de seguimiento, con la posibilidad de que se vuelvan a colocar brackets en el caso de que la primera vez no haya sido suficiente. En lo que respecta al objetivo de cada una de las partes del tratamiento; de una parte la ortodoncia irá dirigida a alinear la dentadura mientras que la cirugía maxilofacial va dirigida a conseguir que la cirugía ortognática sea un éxito.
Imágenes cortesía de Galería de COMSALUD